Johan Galtung, además de analizar las diferentes formas de violencia y proponer estrategias para la transformación de conflictos, también desarrolló el concepto de transarmar, un término que busca ir más allá del simple desarme, que se centra en la reducción de armamento militar. Transarmar, en cambio, se enfoca en desmantelar las estructuras y las culturas que sustentan la violencia, creando condiciones para una paz más profunda y duradera.

El concepto de transarmar se basa en la idea de que la violencia no se origina únicamente en la presencia de armas, sino que tiene raíces más profundas en las estructuras sociales, económicas, políticas y culturales. Por lo tanto, para prevenir la violencia de manera efectiva, no basta con reducir el armamento; es necesario transformar estas estructuras y culturas que la legitiman y la perpetúan.

Galtung distingue diferentes dimensiones de transarmar, que se corresponden con sus tres tipos de violencia:

Transarmar estructural: se centra en la transformación de las estructuras sociales, económicas y políticas que generan desigualdad, injusticia y opresión. Implica abordar las causas profundas de la violencia estructural, como la pobreza, la discriminación, la exclusión social y la falta de acceso a recursos básicos. Esto puede incluir la implementación de políticas públicas que promuevan la equidad, la justicia social, el desarrollo económico sostenible y el respeto a los derechos humanos.

Transarmar cultural: Se centra en la transformación de las normas, los valores, las creencias y los símbolos que legitiman la violencia. Implica promover una cultura de paz basada en el respeto a los derechos humanos, la tolerancia, la diversidad, el diálogo intercultural y la resolución pacífica de conflictos. Esto puede incluir la educación para la paz, la promoción de expresiones artísticas y culturales que fomenten la paz, y el diálogo interreligioso e intercultural.

Transarmar directo: Si bien el enfoque principal de transarmar está en las dimensiones estructural y cultural, también implica acciones para reducir la violencia directa. Sin embargo, no se limita al desarme militar, sino que también incluye otras medidas como la desmovilización de grupos armados, la reinserción de excombatientes en la sociedad, el control de armas y la promoción de la seguridad ciudadana.

Es importante destacar que transarmar no es un proceso unilateral, sino que requiere la participación de múltiples actores, incluyendo gobiernos, organizaciones internacionales, organizaciones de la sociedad civil, comunidades locales y las propias partes en conflicto.

Galtung enfatiza que transarmar es un proceso a largo plazo que requiere un compromiso sostenido y una visión integral. No se trata de una solución rápida o fácil, sino de un cambio profundo en la forma en que se organiza la sociedad y en la forma en que se conciben las relaciones humanas. En resumen, transarmar según Galtung representa un enfoque integral para la prevención de la violencia y la construcción de paz. Va más allá del simple desarme militar y se centra en la transformación de las estructuras y las culturas que sustentan la violencia. Al abordar las causas profundas del conflicto, transarmar busca crear las condiciones para una paz más justa, equitativa y duradera. Este concepto complementa los otros aportes de Galtung y ofrece una perspectiva valiosa para la acción práctica en la construcción de paz.

Johan Galtung (nacido en 1930) es un sociólogo y matemático noruego reconocido como uno de los fundadores de los estudios de la paz y los conflictos. Su trabajo ha sido fundamental para comprender las dinámicas de la violencia, la paz y el desarrollo en el ámbito internacional.